Lámparas acústicas
El ruido de las impresoras, las llamadas telefónicas o los teclados son inevitables en el día a día de la oficina. Sin embargo, para mantener la productividad y proteger la salud de los empleados frente al estrés producido por el ruido (el rendimiento de los empleados se reduce hasta en un 10 %), las empresas modernas apuestan por medidas de insonorización. Una de las más eficientes, que combina la necesidad de iluminación artificial de oficinas con la absorción del sonido, tiene como protagonista a las lámparas acústicas.
Formas de ruido
Afecta directamente a la audición, por ejemplo, un trauma acústico. No suelen ocurrir en el día a día en la oficina, pero en la seguridad laboral, p. ej., durante los trabajos de construcción, son un tema importante.
Son una reacción de estrés a un nivel de ruido excesivo que, p. ej., se expresa en una pérdida de rendimiento y también afectan a la salud. Suelen darse sobre todo en el día a día en la oficina.
Una supresión de sonido inadecuada hace que también se escuchen las conversaciones personales. Existe una falta de privacidad acústica y constantemente uno se siente "escuchado".
Cuadro de información: requisitos legales
No existen límites legales relativos al ruido en la oficina. No obstante, la norma DIN EN ISO 11690-1 recomienda valores máximos, que tenemos en cuenta en nuestros consejos, así como otras recomendaciones de instituciones estatales y asociaciones profesionales
Los niveles de presión sonora de > 55 dB ya se perciben como molestos.
A un nivel > 70 dB, la calidad de la voz sufre.
En las oficinas, el nivel de ruido de fondo no debe superar los 30-45 dB
En lugares de trabajo industriales, los niveles de ruido de fondo de 65-70 dB son inevitables.
La mayor contaminación acústica es de esperar en la oficina a causa de los dispositivos electrónicos y de los propios trabajadores. Con un buen concepto de oficina y lámparas acústicas de alta calidad, garantizamos una mejor acústica espacial y, por lo tanto, un mayor nivel de satisfacción de los empleados.
Dónde usar las lámparas acústicas
Existen varias formas de reducir el ruido en la oficina (abajo figuran más medidas). En espacios públicos, p. ej., en la gastronomía, un descanso acústico también aporta un valor añadido. Las lámparas acústicas son una solución práctica y estéticamente sofisticada ya que combinan iluminación y absorción de sonido gracias a un cuerpo hecho de material fonoabsorbente, p. ej., de fieltro de algodón.
Otras medidas de reducción de ruido
Se puede lograr un efecto significativo con techos acústicos además de las lámparas acústicas.
Las paredes son muy duras, por lo que reflejan el sonido. Imágenes, calendarios o carteles pueden contrarrestar este efecto.
A diferencia del parqué, las moquetas absorben el ruido de las pisadas. Las plantas de interior también absorben el sonido.
Las estanterías, los archivadores y, por supuesto, un sofá para reuniones tienen una influencia positiva en la acústica espacial.
Las persianas o cortinas que absorben el sonido evitan que los sonidos reboten en las ventanas y regresen a la habitación.
Las fotocopiadoras y las impresoras deben colocarse en la medida de lo posible en una habitación separada. La mayoría de las personas encuentran molesta esta fuente de ruido.